ÉSE EXPEDIENTE X...

martes, 5 de mayo de 2009

Llamo expediente x para que nos entendamos, al extraño caso que está ocurriendo en el Sevilla Fútbol Club con uno de los fichajes que se nos vendió el año pasado con más ilusión y futuro alentador.

Me estoy refiriendo al caso de Lautaro Acosta.

Fichado en el mes de Junio del año pasado, anunciado como un jugador de los que yo llamo ratonero, muchísima movilidad, se puede desenvolver sin problemas en cualquier posición de medio campo hacia adelante, buen asistente aunque no buen realizador.

Todo ésto combinado con una edad de lujo, en circunstancias normales hubiése dado un resultado de un posible jugador revelación en nuestra liga aparte lógicamente de una alternativa más para Jiménez y de un soplo de aire fresco y un "apretamiento de tuercas" a Jesús Navas, futbolista que hasta el pasado Sábado sabía y creo que aún se sabe intocable en el once inicial tipo del Sevilla.

Pero hete aquí, que tras no jugar demasiados minutos en el inicio de campaña (hay que recordar que no pudo realizar la pretemporada completa por mor de los malditos JJ.OO), tuvo algún que otro partido suelto cuando comenzó la plaga de lesiones de la delantera sevillista.

Tanto es así, que fue el único delantero disponible en la visita a Almeria.

Y resulta que aquél día a mí al menos me causó una muy grata impresión el jugador argentino.

Pues justo cuatro días después, y cuando era participe y titular en uno de los mejores partidos del Sevilla ésta temporada, aquel que se jugó en la bombonera frente al Sttutgart, el argentino cayó lesionado en el primer tiempo.

Hablo de memoria, pero creo que estábamos en el mes de Octubre.

Pues bien, lo que se intuía como una lesión de tobillo, que le iba a mantener alejado de los terrenos de juego un mes aproximadamente, se ha convertido en un auténtico quebradero de cabeza para todo el plantel de médicos que tiene el Sevilla en nómina.

Ha habido desde entonces varios intentos de reaparicion. ha habido desde aquel lejano Octubre varias altas médicas en la mano del argentino.

Ha habido partidos sueltos e incluso siendo protagonista estelar, como aquel gol en Nervión al Bilbao en copa.

Pero el final siempre ha sido el mismo. Un partido, dos convocatorias, lo sumo tres y vuelta al infierno.

Y así desde Octubre, para desesperación de los médicos, del jugador, de la secretaría técnica y de la afición lógicamente.

Nadie sabe a ciencia cierta cual va a ser el final de éste túnel larguísimo y oscurísimo en el que anda metido el argentino, que realmente había creado expectatvas muy positivas en sus inicios, y al que ya están tachando de un auténtico bluff de la dirección deportiva.

Y ahí, es donde yo no comparto de nuevo la opinión de muchos Sevillistas.

Porque yo realmente me pregunto que ¿donde está el bluff?.

¿Como podemos hablar de bluff, si no hemos visto al futbolista en acción más de dos partidos seguidos?. ¿Porqué éste año estamos tan sensibles con todo, y nos tiramos al vacío de etiquetar a Lautaro como una mentira que vino de Lanús?.

Es que incluso ha salido a la palestra nombres como Colusso, aquél argentino que dijo lo de que le temblaban las piernas al salir a la bombonera de Nervión.

Vamos a ver, podremos exigir responsabilidades al cuerpo médico. Más que todo porque el tema desde un principio ha sido realmente un poco confuso. Pero vamos, que los médicos del Sevilla, a los que tienen que rendir cuentas es al presidente y a su consejo, porque a mí desde luego lo que me digan me lo creeré porque no soy médico.

Pero hombre, me parece muy fuerte que ya se esté tachando de ésto o de lo otro a Lautaro, cuando el jugador, como futbolista en sí es que no le hemos ni llegado a ver una mínima continuidad necesaria e imprescindible para emitir un juicio razonado y con argumentos sobre su valía real como futbolista para una entidad con las exigencias que a día de hoy y gracias a Dios tiene el Sevilla.

Por éso digo, que incluso podríamos enfadarnos por tanta mala suerte, o incluso con los servicios médicos. estoy dispuesto a comprender al que se cabree o tache de inpetos a los médicos, aunque yo no lo comparta.

Pero hombre, esperemos a que el futbolista se recupere (ojalá), a que pueda realizar una pretemporada completa y lógica, y a que el año que viene si Dios quiere se integre en el grupo y tenga continuidad.

Sólo así le podremos catalogar de lo que sea.

Pero ¿ahora?.

En fin, quizás me esté haciendo viejo pero es que no entiendo ya a muchos de mis aficionados Sevillistas.

1 comentarios:

Salvador dijo...

Sin duda en muchos aspectos ha sido un año rarito. El tema de las lesiones no hay que pasarlo por alto. Lo que hace uno o dos años eran recuperaciones casi milagrosas ahora se han convertido en semanas de recuperación. Hasta hace poco, terminaba un jugador exausto el Domingo y te decían el Lunes que estaba entre algodones pero el siguiente partido lo jugaba. Ahora después de dos meses de recuperación te anuncian a bombo y platillo su vuelta para, en dos semanas, recaer en la lesión.

La suerte es muy volatil.