SEVILLA FC 0-0 ESPAÑOL

domingo, 25 de octubre de 2009

Segundo tropiezo consecutivo del Sevilla en el campeonato nacional de liga, al no ser capaz de ganarle al Español de Barcelona en el Sánchez Pizjuán en la noche de ayer.

Un punto ganado de los últimos seis, que hay que solucionar si o si, sin remisión el próximo Sábado en Jerez, donde no cabe otra que ganar si no queremos a empezar a ver "fantasmistas" en cuanto al rendimiento del equipo en liga.

La lectura es distinta al partido del Depor. Muy distinta en cuanto a juego, porque ayer noche el Sevilla, bajo mi punto de vista, dio un auténtico recital de juego, de llegadas, de querer siempre hacerse con el botín completo.

Con dos bandas demoníacas para el Español, y encarnadas por Perotti y por Navas, el Sevilla fue un constante aluvión para un Español que no obstante, ni se colgó del larguero (con once), y que nunca renunció a la posible sorpresa en la pradera rojiblanca.

Me gustaron los pericos, aunque me gustó lógicamente mucho más el Sevilla.

Cierto es, que analizando el partido en frío, jugando de ésa manera al Sevilla se le van a escapar pocos puntos de Nervión. Pero ayer se le escaparon, y éso equivale al menos para mí a partido malo.



Lo único que vale, es la victoria y lo demás son milongas o consuelos de mediocres.

Y ayer no se ganó.

Preocupante por ejemplo los dos últimos partidos de Álvaro Negredo, el cual parece que quemó su pólvora de forma momentánea en el partido de mierda de la mierda de selección española. ¡Que asco de partidos internacionales y de selección!.

Muy mal Negredo. Parece ser que al ex delantero del Almeria, le han sentado mal toda la sarta de piropos que recibió tras aquella noche de hace dos semanas. Mucha selección, pero al bueno de Negredo, se le están escapando últimamente oportunidades claras de hacerse con el "9" titular de éste Sevilla.



Le conviene un buen banquillazo a éste nuevo "megacrack", que funcionó bastante mejor con la humildad inicial, que con el halo de piropos periodísticos recibidos tras aquella puñetera noche.

Todo lo que se siga escribiendo a partir de aquí son milongas.

El equipo estuvo superofensivo, el equipo tiene un negro en el centro del campo que es una especia de supermán, que está en todos sitios y que siempre da un recital de colocación, de ser un superdotado tanto física como posicionalmente, y que dominó el centro del campo ayer a su antojo.

Todo fué intachable. Todo fue perfecto.



Pero el resultado no. El resultado dice que un Español que jugó con diez muchos minutos, se llevó un punto ayer de Nervión, y evitó por ejemplo que volviésemos a pillar a un Real Madrid que ayer volvió a hacer el ridículo.

Ya son dos partidos consecutivos sin ganar en Nervión.

Jugando así, ganaremos un montón de partidos por supuesto, pero los dos puntos que se dejaron de sumar ayer, ya no volverán, y a mí éso me jode tela.

Por delante la ida copera frente al ex Ciudad de Murcia y el duelo en Chapin el próximo Sábado.

Hay que ganar y espabilar. No queda otra.

STUTTGART 1-3 SEVILLA FC

miércoles, 21 de octubre de 2009

Tercera victoria consecutiva del Sevilla en la máxima competición oficial a nivel de clubes en Europa, y segunda consecutiva fuera de casa lo cual trae acarreado de por sí un mérito extraordinario, pues para nada es fácil llegar a Escocia y a Alemania y hacer siete goles entre ambos sitios para suamar un seis de seis que tiene al Sevilla en lo alto de su grupo acariciando con las yemas de los dedos el liderato definitivo del grupo.

Y ayer el Sevilla tiró de pegada, el Sevilla tiró de un recital a balón parado que propició que el exraordinario central francés Squillaci metiera la testa en dos ocasiones para batir a Lehman, poniendo el cero a uno y el cero a tres.

Entre medias, una sensacional jugada de la joya argentina Perotti, propició una situación rocambolesca en la que Jesús Navas pescó en rio revuelto clavándole el rejón de muerte a los alemanes con el cero dos.

Y ahora, yo me rio de los que pregonan el jogo bonito, el tiki taka o como se llame.



El Sevilla ganó ayer matando al rival a base de mamporros (goles) en las prácticamente únicas ocasiones que tuvo frente al portal del guardamenta internacional alemán.

Hubo alguna más, pero el Sevilla dió cuando tenía que dar y éso le bastó para ganar una vez más en ésta fase de grupos, que hasta el día de hoy es para enmarcar y no olvidar jamás.

Ganamos ayer como sólo saben ganar los equipos grandes, los equipos con oficio, los equipos que se forjan y labran desde atrás hacia adelante.

Con una defensa sensacional y con un portero de Pino Montano que debutó ayer en Champions de forma extraordinaria, el Sevilla se hizo fuerte ante las tremendas acometidas del equipo alemán, que demostró que si bien no es la octava maravilla del mundo, si quedó claro que no e una bazofia de equipo como algunos querían vender antes del inicio del pleito de ayer.

Se lo jugaba casi todo a una carta y apretó. Pero apretó de lo lindo, vamos.

Pero cuando se empezaron a suceder llegadas y alguna ocasión más o menos clara, el partido cogió la pinta de lo que después ocurrió. Es decir que cuando perdonas a un equipo como el Sevilla, o a un equipo grande, éste te acaba matando a la primera ocasión que se le presente.

Y así fue, córner botado en corto sobre Adriano, centro sensacional del polivalente brasileño y cabezazo de lujo de Squillaci que dejó helado el precioso estadio alemán.



A pesar de ésto, los alemanes no cedieron ni un ápice y siguieron con sus embestidas constantes sobre el portal defendido por Javi Varas.

Pero aquello era un querer y no poder. Mucho dominio, mucha posesión, pero nula pegada.

Y ésto se acaba pagando a la larga cuando enfrente tienes al Sevilla.

Cambio amarrategui de Jiménez en el descanso. En el vestuario se quedó Luis Fabiano (absolutamente nulo ayer), y salió Duscher. Se adelantó un poco Zokora para enganchar con Kanouté. Además ya estaba también en el campo el torbellino argentino que atiende al nombre de Diego y que se apellida Perotti.

Todo ésto le dió al Sevilla más solidez en el centro del campo aunque a base de ser sinceros, jamás pareció tener el control del partido ni de ésa zona vital.

El que si tenía el control era Perotti por su banda. El argentino montó un lio por la zona izquierda y amargó la existencia a todo el que se puso por allí. En una galopada tremenda, llegó un centro envenenado que sacó Lehman como pudo, y allí estaba Navas, que se aprovechó del cante jondo del meta alemán para clavar el rejón de muerte.

Y luego vino el cero a tres merced a otro testarazo con acento galo.

Ni aún así bajaron los brazos los alemanes, que en una acometida final terrible lograron hacer un golazo de falta y acorralaron al Sevilla.



Pero todo quedó ahí. Todo quedó en un arrebato continuo de orgullo por parte de los alemanes, fuerte pero inútil. Nada hizo doblar la rodilla al coloso andaluz, que puso otra pica más en Europa. Y ya son tres de tres. Nueve de nueve y con toda europa pendiente del equipo que pasea el nombre de nuestra ciudad por toda Europa.

Ya ahora se podría seguir escribiendo sobre otras aspectos, que si se jugó bien o se jugó mal, que si el cambio de Luis Fabiano, que si el equipo estuvo muy atrás, y otros bla bla bla diversos.

Pero todo es absurdo y todo es una gran mentira. Lo mismo que jamás pondré una excusa cuando se pierde, porque tirar de excusas es convertirte en perdedor, jamás diré nada cuando el Sevilla gane. Ganar es jugar bien. Todo lo demás es mentira.

Y ayer vimos una verdad tela de grande. La victoria enorme de un equipo enorme.

¿Lo demas? lo dicho, mentira y además cochina.

CUIDADITO

martes, 20 de octubre de 2009

Cuidadito con el partido de hoy. Cuuidadito con el tercer partido de Champions League en la presente temporada, segundo como visitante porque me da la impresión de que el toro que vamos a tener enfrente no es tan mansito como nos qieren vender.

Y digo ésto, aún a sabiendas de que el Stuttgart, no está realizando ni mucho menos una temporada de enmarcar.

No les va la cosa bien a los teutones. Claro que no.

Pero éso es una cosa, y otra bien distinta es vender desde todos los sitios periodísticos del mundo mundial, la obligatoriedad que tiene el Sevilla hoy de ganar por tercer partido consecutivo en ésta champions.

Y ojo que ni estoy poniendo el parche antes de que salga el grano, ni pienso por asomo en que tengamos que temerle absolutamente nada a los alemanes. Nada más lejos de mi intención.

Ahora bien, me rio yo de ésas crónicas prepartidos de algunos periodistas con dobles intenciones en las que se mete una presión brutal al equipo, al club y al entorno con la coletilla famosa de que "si se quiere ser grande", pues por ejemplo hoy hay que ganar.

Como si llegar al campo del Stuttgart, que se juega en casa casi la vida en Champions y ganarles sea como tomarse un café en el bar de la esquina escuchando musica.

Éstos comentarios si que son poner el parche antes de que salga el grano.

Con comentarios como éstos (que abundan hoy), ya se está adelantando lo típico es decir que si se gana, el mérito será nulo pues el Sevilla a día de hoy es mucho mejor equipo de fútbol que los alemanes.

Por el contrario, si se pierde ya empezarán las dagas a chirriar, ya mpezarán algunos pregoneros a hablar de mala pinta, de poca profundidad de banquillo, de ésto o de lo otro.

Porque cuando el Sevilla gana, es porque tiene que ganar, pero cuando pierde es por culpa de Jiméne o del que corta el césped.

Y que conste que yo pienso a día de hoy, es que en circunstancias normales, el Sevilla a pesar de tener que prescindir de Palop, de Renato y de Negredo, es superior a los alemanes.

Pero ésto en el fútbol queda muy bonito de boquilla. Luego, en la práctica todos sabemos que el fútbol es un deporte muy muy caprichoso e imprevisible.

¿Que diría un periodista extranjero a día si hoy si un equipo del país que sea viniése a enfrentarse al Villarreal?. ¿Que el Villarreal es malísimo y que va el último?.

Pues mire usted, no. Pero noo rotundo.

El Villarreal va el último, pero no es malísimo. Al contrario, es un gran equipo que no está pasando por un buen momento. Pero que es un equipo diseñado y capaz de competir con cualquiera no podría negar nadie ¿no?.

Pues ésto último, vale para los alemanes. ¿Que no están en un buen momento?, de acuerdo. Pero de ahí a que el asunto sea fácil y por cojones, o porque sí hay un abismo.

Vuelvo a insistir que sin perder un ápice de ambición, de hambre y de querer más y más, tampoco convendría que perdiésemos el ideal maravilloso del paso a paso de la humildad, de estar ahí con poco ruido, y del no mirar más alla del partido a partido.

Así, evitaremos presiones absurdas, así evitaremos en malos momentos darle carnaza a quién está loco por la música. Así pienso que seguiremos siendo la envidia de media europa.

Y que conste que yo creo que hoy vamos a ganar. El Sevilla me invita a éste optimismo.

Pero sí soy consciente de que el partido habrá que trabajárselo bien desde el principio y no salir subiditos.

Todos recordamos el recital de Glasgow hace poco. Pero en aquel partido, hubo fases en las que las pasamos canutas. Tela de canutas. Y el hilo que separa la derrota de la victoria es muy muy delgado.

Por éso Sevilla, hay que salir con las ideas claras, hay que salir con tranquilidad y sin humos subidos.

Hoy el Sevilla casi puede cerrar la primera fase de la Champions, y hay que ir a por ése objetivo. Pero si no se puede, pues al menos no perder. No volverse locos.

Y por favor, si se gana, evitemos luego declaraciones altisonantes, declaraciones de rellenar portadas, simplemente opinemos del partido, y a pensar en el Español.

Así, evitaremos dar carnaza a algunas aves carroñeras que pululan por ahí.

En fin, luego nos vemos y que Dios nos coja confesados.

DEPORTIVO 1-0 SEVILLA FC

sábado, 17 de octubre de 2009

Teníamos que volver a saborear el amargor de la derrota algún día, tras tanta exhibición y nos ha tocado hoy en Riazor.

Y nos ha tocado porque sencillamente el Sevilla se ha visto atado de pies y manos por un Deportivo que ha estado tremendamente ordenado, cerrando cualquier posibilidad de penetración por banda y cortando cualquier vía de penetración del Sevilla.

Y éso que el Deportivo no nos ha creado ni el más mínimo problema en cuanto a nuestra defensa se refiere. Vamos, que en ataque el depor ha estado exactamente igual de plano que nosotros.

Pero claro, Juan Rodríguez se ha sacado un zapatazo tremendo precedido por una fantástica asistencia de Fernando Navarro, que en un despeje absolutamente lamentable en una jugada sin peligro alguno, nos ha costado los tres puntos en litigio en un partido que olía fuerte a empate a cero según lo que se pudo ver hasta el momento del gol del ex futbolista del Málaga.



Ni ha existido Navas, ni ha existido Perotti, Kanouté ha cuajado un partido horripilante y he visto fundido desde casi el pitido inicial a Álvaro Negredo, que me dá la impresión que ha pagado hoy el desgaste enorme del pasado Miércoles, que fué el día de se estreno goleador con la selección española.

Nadie ha ganado a nadie. El Depor para nada ha sido superior a nosotros pero con orden y con un zapatazo de lejos, nos ha ganado.

Es la segunda vez en lo que va de temporada que nos ponemos por detrás en el marcador y es la segunda vez que palmamos.

Lo mismo ocurrió en Valencia.

Hoy no se ha hecho el ridículo como aquel día, ni mucho menos.

Al menos ha habido actitud, ha habido raza e intentonas varias de poder rascar algun punto, pero no sé que ocurre que cuando nos ponemos por detrás nos cuesta un auténtico mundo remontar e incluso crearle el más mínimo peligro al equipo contrario.

Pero tampoco hay que darle más vueltas al asunto.

Ésta derrota no debe de suponer una tragedia Griega ni mucho menos. Y lo dice uno al que una derrota del Sevilla le equivale a una puñalada en el corazón, quién me conoce lo sabe.

Pero hay que hacer borrón y cuenta nueva. Lo mismo que no soy partidario de recordar per secula seculorum las grandes victorias, tampoco soy partidario de darle ni la más mínima vuelta a las derrotas, que para éso ya está el cuerpo técnico que deberá analizar y explicarle a la plantilla que es lo que ha pasado hoy.



Conviene echar el telón y empezar a pensar en el partido del próximo Martes frente a los alemanes del Stuttgart en el que una victoria nos dejaría la clasificación para octavos metida casi en su totalidad en los bolsillos.

Lo de hoy hay que considerarlo como un accidente, aunque tampoco convendría olvidar que nos ha ganado un equipo que ahora mismo está con los mismos puntos que nosotros, es decir que está completando un inicio de campaña fantástico y que no es un rival para nada fácil.

Hay un mundo por delante, y hay mucho margen de mejora, para conseguir el verdadero objetivo del club que no es otro que quedar entre los cuatro primeros, porque todo aquel que piense en campeonatos de liga, es bajo mi punto de vista y con todo el respeto del mundo un iluso.

Nos faltan dos escalones para pelear de tú a tú al Real Madrid y al Barcelona.

Así que también sería bueno empezar a borrar de la cabeza ideas raras, ser realistas y pensar en el día a día, en el partido a partido, que así nos ha ido siempre tela de bien, y dejarnos ya de pájaros en la cabeza que no hacen otra cosa que perjudicar al club.

Es bueno ser ambicioso, pero aún mejor es ser realista.

Pero bueno, no pasa nada de nada. A descansar a recuperarse y asaltar terreno teutón.

No hay tiempo de llorar, sólo hay tiempo de corregir lo de hoy dentro de unos días y venirnos casi clasificados para octavos en la Champions.

GRAN TRAGEDIA

sábado, 3 de octubre de 2009

La que hay formada, Dios mio.

La que hay formada porque el portugués Cristiano Ronaldo no viene a Sevilla. Lloran y lloran los periodistas capitalinos, porque su juguetito nuevo, la niña de sus ojos, el niño mimado, el niño bonito del Dios Florentino no puede jugar mañana contra el Sevilla.

Parece que no existe nada más en éste mundo.

Parece que éste tio, naciddo en Portugal y criado en Manchester, es lo único que vale en ésta liga, en éste pais, en el mundo y hasta en las galaxias.

Y yo, que como casi siempre ya estoy empezando a cogerle asco al niño éste, que a mí no me ha hecho nada, pero a ello me están empujando los enfermos mentales que escriben desde Madrid a todas horas de él.

Y lo peor del caso, es que cuando el partido de mañana termine, y le hayamos ganado al Real Madrid, ya tenemos la excusita de siempre. Es decir que ganaremos porque el juguetito del Dios Florentino, no ha podido venir a Sevilla porque unos hombres muy malos, le hicieron pupita el pasado Miércoles.

Estoy hasta las narices de Cristiano y del Real Madrid, el cual a medida que pasan los años me va cayendo cada vez más y más gordo. ¡Que asco de gente!.

Y libro de ésto último a los aficionados del Real Madrid.

Pero no puedo evitar, sentir nauseas de la maquinaria mediática que acarrea éste equipo, no ahora sino desde que tengo uso de razón.

Para nada cuenta el Sevilla. Para nada cuenta los 22 extraordinarios futbolistas que mañana por la noche saltarán a la pradera nervionense.

Kaká, Luís Fabiano, Benzema, Negredo, Casillas, Palop etc etc etc.

Nada de ésto importa ni interesa.

Lo único destacable del partido es que no viene Cristiano. Y además de ser lo único destacable es ya la excusa por si el juguete del Dios Florentino, dobla la rodilla ante el rodillo de José María del Nido.

Yo hubiése preferido que hubiése venido. Y no lo digo con la boca pequeña. Lo digo alto y clarito.

Porque el estar pensando en si viene o deja de venir el portugués es simplemente de equipo pequeño y de equipo acomplejado.

Nos debe de importar un pito quien juegue o deje de jugar.

Lo que nos debe de importar es el salir desde el minuto uno al 90 con el turbo metido, matando en cada jugada, y corriendo setenta veces más que ellos. Hay que echarle tela de cojones al asunto, y luego la calidad decidirá.

Porque aparte de Cristianos y Kakas, mañana saldrán vestidos de blanco unos jugadores que están levantando la admiración en toda Europa, que está arrasando allá por donde va y al que muchos plumillas consideran como alternativa real a los dos gigantes de la liga española.

No he podido escribir durante ésta semana, por éso aprovecho ahora para darle un tironcito de orejas a mi entrenador. A Manolo Jiménez.

No me gustaron las palabras que el mister sevillista, dijo en Radio Marca hace tres días a nivel nacional. Dijo que prefería que Cristiano no viniése.

Y éso es mentalidad de equipo pequeño, tal y como digo arriba.

Me gusta mucho más las declaraciones de Jesús Navas, "mejor con Cristiano", o las del mismo Perotti: " que venga Cristiano para que luego no haya excusas".

No me gustaron las palabras de Jiménez y así lo digo.

Única y exclusivamente deberíamos de mirarnos a nosotros mismos. No hacer experimentos ni alineaciones raras en virtud de quien nos visite o en función de donde juguemos.

La grandeza no sólo te la dan los títulos, o el ser terceros.

Éstos también son detalles de grandeza. Y espero y deseo que Jiménez la próxima vez no diga que mejor sin Ibrahimovic que con él, o que ojalá no juegue Alves.

Ay Manolo Manolo, con lo tranquilo que estábamos......