SIEMPRE HAY UN PERO

lunes, 20 de octubre de 2008

Yo ya lo decía o advertía mejor dicho en el post justamente anterior a éste y que servía para describir la victoria del Sevilla ayer en Almería.

Lo que venía a decir éste que escribe todo ésto es que el Sevilla Fútbol Club, cuando gana, que por cierto es casi siempre mal que le pese a mucha gente, siempre es propiciado por algún demérito del rival, por alguna ayuda externa o por algún motivo extraordinario, porque sinceramente es evidente que a algunos les cuesta muchísimo trabajo reconocer lo evidente.

¿Y que es lo evidente?.Pues lo evidente es que tal y como he dicho en muchísimas ocasiones, el Sevilla Fútbol Club a día de hoy es un portaaviones al que nada ni nadie puede siquiera acercarse a intentar hundirlo. No ya sólo intentar hundirlo, sino siquiera acercarse con ése objetivo.

Si el partido de ayer se hubiése perdido, hoy hubiésen salido las voces pregoneras y malvadas diciendo que el Sevilla no tiene fondo de armario, que hay sólo trece o catorce futbolistas de nivel y que con lo larga que es la temporada y las muchas lesiones y expulsiones que acarrea una liga tan dura como ésta así no se puede aspirar a nada.

Y que los refuerzos son un fracaso y que ésto y que lo otro.

Cómo ésta táctica les ha salido rana, pues nada damos palitos en otra dirección.

Y ésa dirección no es otra que la del maldito juego bonito. Un juego bonito que me gustaría que alguien me explicase. ¿Que es jugar bonito? ¿Ganar 8 a 7 por ejemplo?. Pues el día del Gijón se ganó por 4 a 3 en un espectáculo tremendo de goles y llegada y sin embargo ¿que ocurrió?: pues que los de siempre empezaron a pregonar a los cuatro vientos que el Sevilla volvía un año más a ser un desastre en defensa.

¿Porqué el año pasado se resaltaba una y otra vez los desajustes defensivos y se ponía en duda la capacidad de un hombre que se llama Manolo Jiménez al que reiteradamente y de forma cobarde, vil y rastrera se le ha faltado el respeto y se le ha intentado humillar constantemente?.

¿Nadie tiene ahora cojones de salir de su madriguera y decir que con éste señor se ha equivocado y que le pide disculpas públicamente?.

¿Acaso queremos o mejor dicho quieren que el Sevilla sea el único club del mundo de toda la historia que gane todos los partidos por 5 a 0, a la vez genere 25 ocasiones de gol y encima el rival no pase del centro del campo?.

Si nos volvemos una roca atrás, salen con el juego bonito. Si creamos ocasiones y metemos cuatro pero nos meten tres, que si no hay calidad atrás, y el caso es siempre el mismo: nunca caen del burro.

¡Venga ya hombre!. ¿Porqué se le exige de ésta manera a un equipo que está teniendo los santos cojones de ser una alternativa al poder madridista y culé establecido per secula seculorum en éste pais?.

¿Porqué no se resalta que a pesar de perder a un futbolista en la hierba el año pasado, de sufrir la traición más grande jamás contada por parte de un desgraciado que es millonario sólo en libras, de perder éste año a tres estandartes del equipo del año pasado y de los últimos años, de ir a Almería ayer sin ningún delantero titular, de no contar con el apoyo mediático ni arbitral de otros, el Sevilla sigue ahí año tras años?.

¿Porque no se resalta ésto y se bajan ya de su asqueroso burro de críticas y de odio visceral a quien nos ha puesto donde estamos que no es otro que el mejor presidente que ha tenido en su historia el Sevilla y que se llama José María Del Nido Benavente?.

De verdad que no sé que es lo que quieren que haga el Sevilla. Con lo fácil que resulta decir: señores lo del Sevilla es de sombrerazo, o de mamazo o com quieran llamarlo.

Ya está bien de tener que pasar en cada partido una reválida. Ya está bien de intentar quitarle a éste equipo o mejor dicho a ésta entidad ni siquiera un ápice de mérito en la historia tan grande que está escribiendo día tras día.

Tanto en estructuras como a nivel deportivo, el Sevilla Fútbol Club es hoy un ejemplo a seguir por cualquier equipo del mundo. Por cualquiera sin excepción.

Sé positivamente que no nos deben de preocupar éstos hechos. Quizás, deberíamos de reirnos sólamente de la maldita impotencia que derraman algunos a chorreones y no ven como poder taparla.

Pero desde luego lo que no puedo evitar es el coraje tan grande que me entra cuando intentan quitar mérito o buscar cosquillas absurdas e inexistentes a la labor encomiable, indestructible y ejemplar que desarrolla nuestro club día tras día.

Yo llevo ya tiempo advirtiendo que el que se esté tragando las bilis y arañándose la cara, lo va a tener que seguir haciendo. Y por mucho tiempo. Por una razón muy sencilla; porque el aroma que despide éste equipazo de leyenda es aroma de algo gordo.

Porque yo tengo ésa impresión. De que el Sevilla éste año puede optar a todo. Y cuando digo todo quiero decir a todo con mayúsculas. Sé que será muy complicado porque estamos sólos, solítos en el empeño, pero desde luego a mí nadie me va a quitar ésa ilusión.

O mejor dicho: el único que me la podrá quitar será el propio Sevilla.

De los demás, nadie.

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