El pasado Viernes, ya di cuenta de unas pruebas que los jugadores de nuestra primera plantilla Lautaro Acosta y Ernesto Javier Chevantón se hicieron en la clínica La Esperanza en Vitoria.
El resultado de las mismas estaba anunciado para el Martes, aunque hemos debido de esperar a última hora de la tarde del Mieércoles para que saliésen a la luz los resultados de ambas resonancias con cartografía.
Lautaro Acosta parece ser que ha superado la prueba con resultados positivos, aunque eso sí, aún tardará un par de semanas al menos en entrenar o intentar entrenar al mismo ritmo que los demás, ya que durante aproximadamente diez días estará haciendo trabajo de readaptación, y una vez pasados éstos diez días, se evaluará de nuevo su evolución.
Si hoy Jueves estamos a día 11 y le sumo diez o doce días, a la conclusión que llego si no me llevo más sorpresas es que Lautaro deberá estar disponible para el primer partido después del parón de Navidad.
Aunque yo soy muy prudente o escéptico ya con el tema de las lesiones, pues con éste jugador se dió un plazo determinado y ya vamos por el doble de tiempo del que se dijo, y el jugador de momento no está disponible.
Confiemos una vez más en la transparencia de nuestros servicios médicos y ojalá que ésta vez sea la definitiva y podamos ver al pequeño jugador argentino rendir y jugar en nuestro equipo después de navidad, porque son muchísimas las expectativas que ha levantado el argentino, a pesar de no haber podido jugar practicamente nada.
Sus detalles de gran jugador frente al ex-eterno rival, al Red Bull Salzburgo, Almería y un rato frente al Stuttgart (día que se lesionó), le dan crédito ante una afición tan exigente y que está de uñas con los fichajes últimamente.
Pero el caso que a mí me preocupa de verdad es el del Uruguayo Ernesto Javier Chevantón.
Mira que tenía yo ilusión en éste futbolista desde que llegó. Yo le había seguido mucho en su época del Lecce en Italia, y reconozco que menos en su época del Mónaco.
En Italia era una auténtica piraña del área. Un auténtico killer que me enamoró por su garra, por su recorrido, por su toque a balón parado y por su oportunismo alucinante que le llevó a ser capo canioneri de la serie A del Calcio italiano.
Y conseguir ésto no es nada de fácil, os lo aseguro.
Pero Cheva tiene un problema crónico con su rodilla, que desde que llegó, y llegó lesionado, no le ha permitido rendir absolutamente nada de nada.
Desde luego si analizamos sus minutos jugados y lo comparamos con los goles marcados, el porcentaje y la capacidad goleadora del charrúa es brutal.
Pero a ningún equipo del mundo, a ninguno, le sirve para nada un jugador que por hache o por be está el cuádruple de tiempo en el dique seco que en terreno de juego.
No sé muy bien porque no soy médico, si todas las lesiones que está teniendo Cheva, vienen arrastradas, o tienen relación o que es lo que realmente provoca la desesperante fragilidad de un futbolista que en su día fué el fichaje más caro de la historia de nuestro club, y que aparte de su no compatibilidad con el Judas, se ha encontrado de bruces y una vez tras otra con la losa de las malditas lesiones.
Yo, tal y como digo arriba y mientras no me demuestren lo contrario, confío ciegamente en los servicios médicos del Sevilla. Lo digo en serio y a pesar de que últimamente por los motivos que sean, no se está teniendo suerte sobre todo en el tema de tiempos de recuperación.
Pero el tema de Chevantón no huele nada bien. Compañeros, amigos, lo digo tal y como lo siento. No me gusta para nada el tinte que está cogiendo el tema de ésta lesión eterna de un jugador que aparentemente estaba recuperado el día del Málaga, día en el que llegó a jugar unos minutos, y que tras ése día ha vuelto al dique seco del que aún no ha podido salir.
Ahora anuncian que puede estar disponible dentro de un mes.
Y yo no tengo argumentos para decir ni pensar lo contrario, aunque éso sí, tengo intuición de que el tema pinta feo. No sé porqué, pero estoy notando sensaciones muy parecidos al tema Javi Navarro. Y ojo que sé que lo de Navarro posiblemente no tenga solución ya, y lo de Cheva, bueno pues quizás sí.
Pero el asunto despide desde luego un tufillo sospechoso que me invitan a ser pesimista. Ojalá me equivoque y lo digo de corazón.
Suerte Cheva, suerte de corazón. Y a tí Laucha lo único que te puedo decir es que tengo tela de ganas de verte liarla en nuestra bombonera.
Ojalá sea más pronto que tarde y los Reyes Magos nos traigan la recuperación de ambos.
El resultado de las mismas estaba anunciado para el Martes, aunque hemos debido de esperar a última hora de la tarde del Mieércoles para que saliésen a la luz los resultados de ambas resonancias con cartografía.
Lautaro Acosta parece ser que ha superado la prueba con resultados positivos, aunque eso sí, aún tardará un par de semanas al menos en entrenar o intentar entrenar al mismo ritmo que los demás, ya que durante aproximadamente diez días estará haciendo trabajo de readaptación, y una vez pasados éstos diez días, se evaluará de nuevo su evolución.
Si hoy Jueves estamos a día 11 y le sumo diez o doce días, a la conclusión que llego si no me llevo más sorpresas es que Lautaro deberá estar disponible para el primer partido después del parón de Navidad.
Aunque yo soy muy prudente o escéptico ya con el tema de las lesiones, pues con éste jugador se dió un plazo determinado y ya vamos por el doble de tiempo del que se dijo, y el jugador de momento no está disponible.
Confiemos una vez más en la transparencia de nuestros servicios médicos y ojalá que ésta vez sea la definitiva y podamos ver al pequeño jugador argentino rendir y jugar en nuestro equipo después de navidad, porque son muchísimas las expectativas que ha levantado el argentino, a pesar de no haber podido jugar practicamente nada.
Sus detalles de gran jugador frente al ex-eterno rival, al Red Bull Salzburgo, Almería y un rato frente al Stuttgart (día que se lesionó), le dan crédito ante una afición tan exigente y que está de uñas con los fichajes últimamente.
Pero el caso que a mí me preocupa de verdad es el del Uruguayo Ernesto Javier Chevantón.
Mira que tenía yo ilusión en éste futbolista desde que llegó. Yo le había seguido mucho en su época del Lecce en Italia, y reconozco que menos en su época del Mónaco.
En Italia era una auténtica piraña del área. Un auténtico killer que me enamoró por su garra, por su recorrido, por su toque a balón parado y por su oportunismo alucinante que le llevó a ser capo canioneri de la serie A del Calcio italiano.
Y conseguir ésto no es nada de fácil, os lo aseguro.
Pero Cheva tiene un problema crónico con su rodilla, que desde que llegó, y llegó lesionado, no le ha permitido rendir absolutamente nada de nada.
Desde luego si analizamos sus minutos jugados y lo comparamos con los goles marcados, el porcentaje y la capacidad goleadora del charrúa es brutal.
Pero a ningún equipo del mundo, a ninguno, le sirve para nada un jugador que por hache o por be está el cuádruple de tiempo en el dique seco que en terreno de juego.
No sé muy bien porque no soy médico, si todas las lesiones que está teniendo Cheva, vienen arrastradas, o tienen relación o que es lo que realmente provoca la desesperante fragilidad de un futbolista que en su día fué el fichaje más caro de la historia de nuestro club, y que aparte de su no compatibilidad con el Judas, se ha encontrado de bruces y una vez tras otra con la losa de las malditas lesiones.
Yo, tal y como digo arriba y mientras no me demuestren lo contrario, confío ciegamente en los servicios médicos del Sevilla. Lo digo en serio y a pesar de que últimamente por los motivos que sean, no se está teniendo suerte sobre todo en el tema de tiempos de recuperación.
Pero el tema de Chevantón no huele nada bien. Compañeros, amigos, lo digo tal y como lo siento. No me gusta para nada el tinte que está cogiendo el tema de ésta lesión eterna de un jugador que aparentemente estaba recuperado el día del Málaga, día en el que llegó a jugar unos minutos, y que tras ése día ha vuelto al dique seco del que aún no ha podido salir.
Ahora anuncian que puede estar disponible dentro de un mes.
Y yo no tengo argumentos para decir ni pensar lo contrario, aunque éso sí, tengo intuición de que el tema pinta feo. No sé porqué, pero estoy notando sensaciones muy parecidos al tema Javi Navarro. Y ojo que sé que lo de Navarro posiblemente no tenga solución ya, y lo de Cheva, bueno pues quizás sí.
Pero el asunto despide desde luego un tufillo sospechoso que me invitan a ser pesimista. Ojalá me equivoque y lo digo de corazón.
Suerte Cheva, suerte de corazón. Y a tí Laucha lo único que te puedo decir es que tengo tela de ganas de verte liarla en nuestra bombonera.
Ojalá sea más pronto que tarde y los Reyes Magos nos traigan la recuperación de ambos.
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