SEVILLA FC 2-0 RCD ESPAÑOL

jueves, 25 de septiembre de 2008

Con mucho sufrimiento pero se consiguió lo principal. Se consiguió ganar y se sumaron tres puntos de oro a un casillero que tras cuatro jornadas ya suma ocho puntos.

Y no fué nada nada fácil.

Porque cuando un equipo no quiere que se juegue al fútbol a base de autobús delante de la portería propia y a base de cortar a patadas o a patada limpia los intentos de jugar al fútbol del otro equipo, con el beneplácito del árbitro, es muy complicado lo que algunos reclaman a pesar de una buena victoria, el juego espectacular.

Sobre el juego espectacular tan cacareado por algunos iluminados hablaré otro día. Pero hoy no.

Hoy de lo que voy a hablar es de que el Sevilla ha sacado adelante con mucho trabajo pero con solvencia un partido importantísimo ante un equipo que jugando a lo que ha jugado hoy y habiendo tirado a puerta en toda la liga no más de siete veces, había conseguido siete puntos de nueve y estaba por encima de nosotros.

Y a todo ésto además, había que añadir la tremenda presión que había por lo ocurrido el pasado Domingo.



Y la verdad es que el partido no ha sido de los de recordar. Pero si me ha dejado buenas impresiones. Porque por ejemplo con lo que le había caido encima a la plantilla desde el susodicho derbi, era muy fácil caer en precipitaciones, en ansiedad, en querer arreglar en 15 minutos lo que se puede arreglar en 90 y en volverse locos en pos de un triunfo aún a costa de que el rival se aprovechase de todo ésto para buscar su oportunidad y dejarnos con un palmo de narices.

Pero no ha ocurrido asi. El Sevilla Fútbol Club, ha sabido madurar el partido. Ha sabido buscar su ocasión. Ha sabido golpear cuando la ocasión se le ha presentado y ha sabido matar el partido de forma definitiva cuando todo se acercaba al final.

Y es que no se puede esperar un fútbol excelso con rivales que vienen a encerrarse. Que vienen a intentar a que no se juegue a nada. Que dan por bueno un empate de antemano aquí, porque saben que se enfrentan a uno de los grandes de nuestra liga.

Y si alguien hay desilusionado porque no hemos tenido 300 ocasiones de gol ni 1500 llegadas al área, pues que se vaya preparando ya que partidos y rivales como el de hoy, nos los vamos a encontrar aquí a manojitos. Tanto en liga como en copa como en Uefa Cup.

El partido arroja muy buenas noticias si lo sabemos ver.

Por un lado hemos recuperado definitivamente a Julien Escudé. Escudé es un jugadorazo como la copa de un pino, que además de ser un sensacional defensa, es una solución espléndida de salida de balón desde atrás cuando el otro equipo presiona a los dos medioscentros. Y Escudé ha vuelto. Y ha vuelto haciendo un gran partido. Tanto en anticipación, como por arriba como sacando muchas veces el balón con sentido.

Bravo Julien y bienvenido a tu sitio.

Otra sensacional noticia, y que ya se intuía en pretemporada, es el crecimiento de Jesús Navas como futbolista. Se ha dicho por activa y por pasiva que con las espaldas mejor cubiertas y con toda la responsabilidad de ataque por su banda para él, éste futbolista iba a parecer otro.

Y así está siendo. Espectacular partido del palaciego que ha vuelto loco a todo el que se le ha puesto por delante, ha sido partícipe en los dos goles y estoy empezando a ver una mejora espectacular en lo que era bajo mi punto de vista su talón de aquíles: los centros al área. Un futbolista que tiene la llegada que tiene Jesús, no puede dedicarse a desperdiciar 90 centros uno tras otro en un partido. Como pasaba antes y como no está pasando últimamente.

Ésa velocidad, ése regate ése desequilibrio que siembra en el costado izquierdo de las zagas contrarias, no se merecen las finalizaciones a las que nos tenía acostumbrados Navas. Parece ser que está corrigiendo el tema. Y si Jesús empieza a centrar bien en un porcentaje aceptable, es ni más menos que uno de los tres mejores extremos del mundo.

Pero es que además se pega un lote de correr tremendo y es un apoyo constante al lateral derecho pues baja una enormidad a la defensa a ayudar y a intentar robar balones.

Diez sobre diez Jesús.

Sensacional partido de Fernando Navarro. Hoy ha demostrado que la banda izquierda del Sevilla, en la parte de atrás, tiene dueño absoluto para toda la temporada.

Segurísimo, ganando casi todos los balones divididos, excelso en el corte, muy disciplinado tácticamente e incluso hoy, ha desdoblado ha conducido el balón y ha hecho unas cuantas arrancadas fnalizadas con éxito que invita a pensar que el internacional nos va a dar tardes muy buenas de fútbol en su sitio.

Gran partido también de Duscher. Espléndido en la recuperación y muy bien en las coberturas.

Y también se demuestra a cada partido que pasa, que éste equipo tiene un lider. Y ése lider es Maresca. Autor de un cabezazo que ejecutado con toda su alma ha supuesto el abrir la lata. Pero es que además, manda, ejerce de capitán y de líder. Todo lo hace con un sentido y una eficacia tremenda. Espectacular el italiano si señor.



Por cierto, precioso el detalle de dedicarle a Jiménez el primer gol. Ha salido corriendo hacia el banquillo y le ha dedicado su gol. Bravo Enzo, eres grande.

A alguna gente que odia a muerte a Mosquera, hay que recordarle el partidazo que se estaba marcando el colombiano hoy en el lateral derecho. Partidazo, hasta que una entrada criminal de un tipo llamado Chica y que se ha ido de rositas se lo ha cargado. Con una entrada de juzgado de guardia, veremos a ver si no se ha cargado a Aquivaldo para un tiempo. Esperemos que todo quede en esguince y no pase de ahí, aunque la cosa no tiene buena pinta la verdad.

Pero hasta el momento de la lesión, estaba demostrando lo que yo ví y dije el día del derbi. Mucho mejor que Konkó, ahora mismo. Ojo que digo ahora mismo, pues yo me niego a pensar que Konkó es el jugador que se ha visto hasta ahora. Yo estoy convencido de que Abdoulay Konkó no ha jugado ni el 30% de sus posibilidades por lo que sea.

Aquí le doy un palito a quien corresponda. Lo siento pero se lo doy.

Crespo también ha debutado hoy en ésta temporada sustituyendo a Aquivaldo, y me quedo con la impresión de que con tiempo, confianza y partidos, tenemos un excepcional lateral derecho. Canterano y de Lora del Rio. Sevillista de corazón y con mucha hambre de triunfo. Enhorabuena a Jose Ángel pues creo que éste año puede ser el suyo.

Mal han estado hoy Luis Fabiano (no parece el mismo desde que llegó de Brasil la última vez) y Diego Capel. Diego lo ha intentado pero no le ha salido nada. No se ha ido casi nunca y las veces que ha conseguido marcharse no ha realizado bien ni un sólo centro. Hay que espabilar Diego, hay que espabilar poque tienes el duro para cambiarlo. Porque a pesar de las puñeteras campañitas en tu contra desde Madrid, aquí se te quiere y se te espera con muchísima expectación porque sabemos lo que vales.

Y otro personaje siniestro hoy ha sido el árbitro. Vaya prenda. Éste ya nos humilló el año pasado en Villareal.

Ha dejado irse al Español de rositas, a base de perdonar reiteradamente tarjetas amarillas e incluso rojas a los muy leñeros hoy jugadores del Español.

Tarjetas ha sacado, pero para la leña que han dado, para la cantidad de contras rápidas que han cortado a base de agarrones y patadas, ha sido una madre. Una madre para el Español, porque para nosotros ha sido una pesadilla.




Por cierto, ésto último (pesadillas), es lo que van a tener hoy algunos periodistas que se han pasado tres días frotándose las manos y deseando que pasara algo que hoy no ha pasado para con sus garras en los teclados, sacar a relucir toda la inquina y todo el odio que le tienen al Sevilla, a Jiménez y a José María del Nido.

Ni ha habido motín de la afición, ni ha habido ajusticiamiento público de Jiménez, ni han volado los puntos ni hay crisis.

Lo que hay queridos míos es lo que hay.

Que el Sevilla está ahora mismo cuarto, que ha sacado un partido dificilísimo adelante con mucho oficio y mucha pegada, y que para vuestra vergüenza, otro futbolista al que le habéis dado estopa de la buena como es Chevantón, ha vuelto a marcar.

Ya sabéis hijos míos, mucho ajito y agua, y a seguir sufriendo. A seguir sufriendo y por mucho tiempo. Por mucho que os empeñeis, los sevillistas no somos tontos. Y jamás nos dejaremos influenciar por vosotros.

Hala, hasta mañana queridos.

Tres puntos a la buchaca y ahora a asaltar el Calderón.

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