¿ Y AHORA QUE?

Esa es la pregunta que como la mayoria de los Sevillistas imagino, se habrán hecho al conocer la noticia de la gravísima lesión de Arouna Koné.

En una mierda de partido amistoso. En Paris, en "todo" un Costa de Marfil - Guinea valedero para nada de nada. Vamos poco más o menos que un partido de solteros contra casados.

Pero la broma le puede salir muy cara al Sevilla Fútbol Club, que a la postre es el que paga al futbolista, es el propietario de su ficha y es el que ahora se ve privado de uno de sus delanteros, y que quizás y sólo quizás, tenga que hacer otro desembolso económico para cubrir la baja del Africano.

Arouna Koné, y tras un primer diagnóstico de los médicos de la selección de Costa de Marfil tiene la rodilla destrozada. Ésto en términos coloquiales.

En términos médicos, el africano sufre la terrorífica triada.

Sólo con nombrarla se me ponen los pelos de punta. Si ya una lesión "normal" de rodilla es complicadísima de areglar, la triada es ya la repera limonera.

Ésta lesión le ha costado la carrera deportiva a muchísimos futbolístas, jóvenes o veteranos no importa.

No tiene por ejemplo nada que ver con la lesión por ejemplo que sufrió Redondo jugando la fase de ascenso en 2007 en Las Palmas, y fijaos lo que le costó volver a jugar.

En cualquier caso, ésto es sólo un ejemplo más del porqué le tengo tantísimo asco a los bolos de las selecciones nacionales.

Por muy bien que quede, y por muy rápido que vaya todo, me parece que éste año no vemos más a Koné. Y no queda otra que joderse. Si señor, joderse. Como por ejemplo el Getafe con Ustari en Pekín ( ocho meses ).

El futbolista ya está en Sevilla. Los médicos del club se quieren poner manos a la obra ya.



Por cierto, estoy leyendo auténticas barbaridades de lo que significa triada.

La triada es un conjunto de lesiones capsuloligamentosas y meniscales graves de la rodilla, constituido por la ruptura de uno de los ligamentos laterales interno o externo, por una lesión del menisco interno o externo y un ligamento cruzado.

Todo lo demás que digan es una aboluta falacia y una forma de desinformar, cosa a la que por cierto nos tienen bastante acostumbrados ciertos medios de desinformación.

En fín, suerte a Koné y recemos para que al menos pueda volver a ser el gran futbolista que es y que iba a demostrar este año en el Ramón Sánchez Pizjuán.

¡Que asco de bolos!